El caso de Juliana Marins, una turista de 26 años originaria de Brasil que perdió la vida tras sufrir una caída mientras escalaba el monte Rinjani, en Indonesia, ha dado un nuevo giro con la revelación de sus resultados de autopsia. El accidente ocurrió el 21 de junio, cuando la joven se encontraba realizando una caminata en grupo alrededor del volcán. Según reportes, alrededor de las 6:30 de la mañana, Juliana cayó por un acantilado a más de mil 500 metros de altura.
Aunque rápidamente llegaron rescatistas para auxiliar a la mujer, los equipos de rescate no pudieron llegar hasta ella debido a las condiciones climáticas adversas, como la espesa niebla que cubría la zona. El cuerpo fue encontrado cuatro días después, el martes 25 de junio. Había caído aún más desde su punto inicial, llegando a casi dos mil pies desde la cima.
La recuperación del cuerpo fue realizada por los equipos de rescate, quienes lo trasladaron al Hospital Bali Mandara, donde se le realizó una autopsia. Los resultados del examen forense indicaron que Juliana falleció como resultado de un traumatismo severo, principalmente en la zona del pecho y la espalda, lo que causó una hemorragia interna masiva. De acuerdo con la especialista forense Dra. Ida Bagus Putu Alit, la muerte ocurrió rápidamente, en un lapso de aproximadamente 20 minutos.

Revelan que la joven cayó dos veces dentro del volcán
Los médicos forenses detallaron que las lesiones más graves se encontraban en el sistema respiratorio, aunque también presentaba otras heridas, incluyendo una en la cabeza. Sin embargo, esta última no fue la causa principal de su fallecimiento. El impacto con la superficie rocosa tras la caída fue lo que provocó daños fatales en los órganos internos. La especialista también señaló que la cantidad de sangre hallada en la cavidad torácica daba cuenta de la magnitud del golpe.
Las autoridades locales sospechan que Juliana pudo haber sufrido una segunda caída, lo que explicaría la distancia entre el punto inicial donde fue vista por última vez y el lugar donde finalmente se encontró su cuerpo. Esto también podría haber contribuido a la gravedad de sus lesiones. El cuerpo fue conservado en un congelador antes de la autopsia, lo que complica con precisión el momento exacto de su muerte. Aunque se estimó que falleció entre 12 y 24 horas antes del examen, los rescatistas aseguran que ya no presentaba signos vitales cuando fue hallada el martes.
INFORMACIÓN: EL HERALDO DE MÉXICO