A un año del Mundial, en duelo de países sede y por la supremacía de la Concacaf, la Selección Mexicana conquistó la Copa Oro por segunda edición consecutiva y decimotercera vez en su historia, luego de derrotar 2-1 a Estados Unidos, con el ‘ADN americanista’ cortesía de los goles de Raúl Jiménez y Edson Álvarez, premio justo para los dos mejores futbolistas del Tri en el certamen.
Sin eliminatorias que jugar por ser anfitriones de la siguiente Copa del Mundo, la última prueba oficial antes del esperado 11 de julio del 2026 era la Copa Oro, a la que México siempre llega obligado para conquistar. Hace dos años fue con gol de Santiago Gimenez ante Panamá; esta vez, hubo voltereta mexicana para confirmar que el “gigante de la Concacaf” sigue siendo el que habla español.
México es campeón de Copa Oro; así le ganó a EE.UU.
La Final se puso cuesta arriba para los dirigidos por Javier Aguirre antes del minuto 5, cuando Chris Richards marcó el 1-0 de Estados Unidos en pelota parada, algo que el Tri había trabajado bien en el torneo, pero que esta vez le costó la desventaja en un cobro muy lejano.
Los mexicanos corriendo contra su portería y el zaguero del Crystal Palace puso su remate de cabeza casi en el ángulo. El balón pegó en el travesaño y apenas rebasó por completo la línea.
A partir de ese momento, México se hizo dueño del partido, se jugaba del lado de la cancha que ellos querían y al ritmo que dictaban. Al filo de la media hora apareció Raúl Jiménez, quien sigue persiguiendo la marca de Chicharito Hernández y esta vez definió precisamente como la leyenda de Chivas en el Mundial 2010 contra Argentina, con una media vuelta de zurda al ángulo para el 1-1, que se festejó en Houston como si estuviesen en CDMX o Guadalajara.
Y más emotivo todavía fue el festejo de Jiménez, recordando al fallecido Diogo Jota, quien fue su compañero en Wolverhampton. Una camiseta con el nombre y el número 20 del portugués, con la celebración de videojuego que el hoy occiso hizo famoso.
No fue el partido más brillante de Alexis Vega, pero fue Roberto Alvarado el que más lo buscó y en el segundo tiempo cerca estuvo de un golazo, al sacar un zurdazo que le sacó pintura al poste más lejano de Matt Freese.
En el minuto 77, Edson Álvarez metió el gol del título. Aprovechando el balón detenido en ataque y con una peinada a primer poste con la que quedó habilitado, el surgido del América remató a placer para el 2-1 definitivo. Euforia total en el NRG Stadium y entre los suplentes, quienes salieron corriendo para abrazar al capitán.
Algún aviso dio el cuadro de las Barras y Estrellas, pero nada que metiera a los mexicanos contra su portería. Los segundos se agotaron y esta vez no fue “DOS-A-CEROUUU” ni victoria de EE.UU. Como en los viejos tiempos, México demostró ser el amo y señor del área, remando contracorriente y demostrando que, a un año del Mundial, es el que más ilusiona de los tres países sede, aunque tampoco para volverse locos.
INFORMACIÓN: FOX SPORTS