La fotografía siempre ha sido un medio para documentar la historia de la humanidad, pero este 30 de julio los flashes se apagan por la muerte del reconocido Rodrigo Moya a los 91 años de edad. Reconocido por su profundo compromiso con la justicia social y su mirada crítica, Moya se convirtió en uno de los más importantes cronistas visuales del siglo XX en América Latina.
Nacido en Medellín, Colombia, y naturalizado mexicano, el fotoperiodista habría pasado sus últimos momentos en su residencia de Cuernavaca, Morelos y acompañado de sus seres queridos, pues su esposa y colaboradora de toda vida, la diseñadora estadounidense Susan Flaherty, estuvo a su lado en sus últimos días, cuidándolo con dedicación.
Fue así como la noticia de su muerte fue confirmada por su hijo Pablo Moya, quien declaró a diversos medios que espera que la memoria de su padre perdure como la de un “fotógrafo ético y comprometido con la verdad histórica”. Hasta el momento, no se ha dado a conocer la causa oficial de su muerte, pero se sabe que el fotoperiodista llevaba varios años luchando con una enfermedad.
¿Quién era Rodrigo Moya?
Rodrigo Moya adoptó México como su patria en 1934 y a partir de ahí se consolidó como una de las voces visuales más influyentes del fotoperiodismo documental, con una obra que trasciende el mero registro para convertirse en una crónica profunda de las desigualdades, las luchas sociales y los movimientos políticos que marcaron distintas épocas.
Por ello, la obra de Moya resulta vasta y profunda; su archivo personal cuenta con más de 40 mil negativos, que él mismo y Flaherty preservaron cuidadosamente a lo largo de los años, formando una colección invaluable que ha sido objeto de estudio y exhibiciones internacionales.
Y es que este acervo documenta no solo a México, sino también episodios clave en países como Cuba, Bolivia y Colombia, ofreciendo una perspectiva crítica y humana sobre procesos sociales muchas veces invisibilizados en los medios oficiales.
Más allá de la cámara, Moya tuvo una carrera multifacética, pues fundó y dirigió la revista “Técnica Pesquera” durante 22 años, una publicación que combinó su interés por el periodismo de investigación con temas relacionados al mar y la pesca, sectores fundamentales para la economía mexicana.
INFORMACIÓN: EL HERALDO DE MÉXICO