Ante un Estadio de Wembley lleno hasta las lámparas, Oleksandr Usyk cumplió con su vaticinio y venció por nocaut en cinco rounds a Daniel Dubois para convertirse en el primer hombre en haber conquistado tres coronas indiscutidas, dos en la división de los completos y una en peso crucero.
Con la expectativa al límite, pues en la primera pelea Dubois logró lastimar al campeón, el público esperaba una respuesta más implacable por parte del local, quien puso sobre la línea la corona de la Federación Internacional de Boxeo.
Sin embargo, utilizando velocidad, contragolpeo y un ritmo oscilante, Usyk comenzó a meter -desde muy temprano en la pelea- poderosas derechas a la mandíbula de su rival.
A pesar de la diferencia de estaturas y peso, Usyk comenzó a cargar con la propuesta de la contienda desde el round inicial, pues Dubois se olvidó del jab y confió en que en algún momento el ucraniano se pararía para recibir una poderosa derecha. Pero más equivocado no podía estar.
Usando el timing y la distancia, así como un ritmo irregular, Usyk (oro olímpico e indiscutido en dos divisiones) logró colar sus golpes en una guardia demasiado endeble del londinense, quien por más que la cerró no pudo evitar ser conectado en varias ocasiones, mientras sus piernas temblaban.
Dubois intentó despertar para el tercer round, pero la maestría y planteamiento de pelea del ucraniano comenzó a jugar en su contra, pues lo sacó varias veces de distancia, dejando los golpes demasiado pasados.
El final de la contienda llegó para el quinto episodio, con un volado en la sien, Dubois visitó la lona. Visiblemente mareado, se levantó para seguir con la contienda y lanzando golpes, logró conectar con suficiente fuerza a Usyk, pero aunque dio muestras de sentirse tocado, lanzó un potente volado de izquierda que entró justo en el botón de la mandíbula.
Dubois hizo el intento de levantarse, mientras el referi canadiense Michael Griffin daba el segundo conteo de protección, pero todo fue demasiado tarde, no pudo superar el 10.
Con esta victoria, Usyk se coronó tres veces campeón indiscutido, dos en peso completo y una en crucero, además de haber mejorado su récord a 24-0 con 15 nocauts. Mientras que para Dubouis, de 27 años, fue su tercer descalabro profesional, todos ellos han sido por la vía del nocaut.
INFORMACIÓN: EL HERALDO DE MÉXICO
